Productos comunes en nuestra sociedad elaborados con plástico, como pajitas o platos de plástico de un solo uso, parece tener fecha límite, o así se deduce de la nueva Directiva aprobada por el Parlamento Europeo hace unos días. Esta nueva Directiva se basa en la legislación vigente de la UE en materia de residuos, pero va más allá, ya que establece normas aún más estrictas para los tipos de productos y de envases que figuran entre los diez artículos que contaminan más frecuentemente las playas europeas.
De esta forma en la UE se prohibirán los siguientes productos:
- los cubiertos de plástico (tenedores, cuchillos, cucharas y palillos)
- los platos de plástico
- las pajitas de plástico
- los recipientes alimentarios de poliestireno expandido, como las cajas de comida rápida, con o sin tapa, utilizados para contener alimentos de consumo inmediato in situ o para llevar, y que pueden consumirse sin ninguna otra preparación posterior que requiera cocinarlos, cocerlos o calentarlos
- los recipientes para bebidas hechos de poliestireno expandido
- los vasos hechos de poliestireno expandido
- los productos de plástico oxodegradable: este término hace referencia a los materiales plásticos que contienen aditivos que, en condiciones aeróbicas, fomentan la microfragmentación del plástico debido a su oxidación. Este tipo de plástico contribuye a la contaminación por microplásticos en el medio ambiente, no es compostable y afecta negativamente al reciclado del plástico convencional
- los bastoncillos de algodón hechos de plástico.
Algunas administraciones autonómicas han iniciado el proceso. Así, la Comunitat Valenciana la fija para el 1 de enero de 2020, día límite que contempla la modificación del Plan Integral de Residuos de la Comunitat para terminar con los plásticos de un solo uso y no reciclables en su territorio. Esta normativa prohibirá la venta de platos, vasos, cubiertos, pajitas, cápsulas de café de plástico, o incluso, el palo de los caramelos.
Según el director general de Calidad Ambiental, Joan Piquer, asegura que este reglamento no va en contra del plástico, sino de aquel que por su tamaño o composición no se pueda reciclar y que acaba en vertederos o en el fondo del mar,
